Esperas al otro lado, esperas descansando. Parada obligada de un sendero encantado. Desfiladero vertiginoso que eleva el llanto, dispara el pensamiento que el trance ha apagado. Caminas mirando al frente, te vuelves postergado. Alzas de nuevo la mirada para reposar el pálpito.
Despertar de un nuevo sueño, soñar que estas soñando. Dulces sueños que despiertan un nuevo amanecer ilusionado. Despiertas que estas dormida, dormida como el alma herida, resuena en el silencio y se aviva cuando respira.
Parada obligada, descanso del viajero. Sendero de rutas que eliges sin sentido. Caminos señalados, entre sueños alcanzados. Detienes tu fuerza, paralizas tu destino. Descansas pensando, mañana comienza un nuevo camino.